Baby Sign: Lenguaje de signos para bebés

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A partir de los 6 meses los bebés empiezan a controlar mejor sus manitas, por lo que podemos intentar comunicarnos con ellos mediante lo que se llama “lenguaje de signos para bebés”. Esta técnica lleva utilizándose desde los años 60 y cada vez más familias la practican. ¡Aprovecha las nuevas habilidades que está desarrollando tu bebé para enseñarle signos con los que se pueda expresar!

Beneficios de enseñar lengua de signos a un bebé

Que tu bebé se comunique contigo mediante signos tiene muchos beneficios tanto para ti como para el pequeño/a. Estos son algunos de ellos:

  • Ayuda a desarrollar el habla, la inteligencia y la personalidad del bebé: Aprender a gesticular y a trasladar un mensaje mediante sus manos hará que tu bebé desarrolle mucho mejor sus habilidades, además también mejorará su autoestima y bienestar.
  • Crea un mejor vínculo con sus cuidadores/as: Si el pequeño/a se siente comprendido/a por los mayores creará un vínculo más fuerte con ellos, además si tú también te comunicas mediante signos, el bebé también te comprenderá a ti y te sentirá más cerca.

¿Cuándo empezar a enseñarle lengua de signos a mi bebé?

Puedes empezar a introducir signos en cualquier momento, pero es más fácil a partir de los 6 meses, cuando veas que tu bebé tiene bien desarrolladas sus habilidades motoras. Este momento suele coincidir con el inicio de la alimentación complementaria, ya que el pequeño/a ya se puede mantener sentado/a, señala lo que quiere, consigue hacer el movimiento de la pinza con el índice y el pulgar, etc.

¿Cómo empezar con la introducción de signos?

Para comenzar es recomendable hacer los signos en tono positivo y haciendo el gesto a la vez que dices la palabra. Si le estás enseñando la palabra “biberón”, por ejemplo, dale inmediatamente su biberón para que asocie el estímulo.

Cuando veas que intenta hacer algún movimiento con sus manitos, aunque sea poco concreto, ayúdale. Puedes mover sus manos haciendo el signo mientras repites la palabra.

Primeros signos que pueden aprender

Algunas palabras que podemos enseñarles son, por ejemplo: leche o teta, biberón, pan, comer… Estas palabras le ayudarán a comunicarse en momentos en los que tiene hambre y así tú podrás saber qué es lo que quiere y satisfacer esta necesidad.


Dar el pecho

Para enseñarle el signo de tomar leche del pecho, en caso de lactantes, puedes colocar la mano en forma de C y moverla sobre la zona del pecho abriendo y cerrando la mano.

Biberón

Para los bebés que tomen el biberón, el signo que podrías enseñarles es colocando la mano con el pulgar levantado y moviéndolo hacia la boca.

Comer

Si colocamos nuestra mano cerrando los dedos y nos la llevamos a la boca, estaremos haciendo el signo de “comer”, si tu bebé hace este gesto, o simplemente se lleva la mano a la boca de forma similar, querrá decir que tiene hambre.

Otros signos que tu bebé puede aprender pueden ser “ya no quiero más” o “más” para indicarte cuando está saciado o cuando quiere seguir comiendo.

 

Más

Si se ha quedado con hambre y quiere más comida una forma para expresarlo es colocar el pulgar hacia arriba y mover la mano de arriba abajo. Este signo suele ser fácil de aprender para los peques.

Ya no quiero más

Para indicar que está saciado y no tiene más hambre el signo será un movimiento horizontal de las dos manos, juntándolas y alejándolas simultáneamente.

Acciones como dormir, jugar o salir a la calle también pueden ser útiles para su desarrollo.

 

Jugar

Este signo se hace colocando las manos en cruz y moviendo los dedos, pero no lo suelen hacer hasta el año de edad.

Dormir

Este signo es conocido por todos, se trata de apoyar la cabeza sobre la mano. Puede que lo haga tal cual o simplemente se lleve demasiado las manos cerca de la cabeza y los ojos.

Si consigues que tu bebé empiece a signar, esto te pondrá las cosas mucho más fáciles cuando tengas dudas sobre qué te quiere decir tu bebé. Si tienes alguna duda sobre esta técnica recuerda consultar con tu pediatra para que te aconseje.

 
Artículo escrito en colaboración con AGaEP, la Asociación Galega de Enfermaría Pediátrica.
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Receta saludable de ñoquis de calabaza con carbonara para niños/a

Hoy te traemos una receta deliciosa y saludable que podrás hacer con ayuda de tu hijo/a, ¡lo pasaréis en grande!

Se trata de unos riquísimos ñoquis de calabaza acompañados de una ligera salsa carbonara. En primer lugar, toma nota de los ingredientes que vas a necesitar, ¡puedes acudir a tu supermercado Gadis más cercano a conseguirlos!

Preparación

Lo primero que tendrás que hacer para preparar tus ñoquis será asar la calabaza, para ello pélala, lávala bien y colócala en trocitos en una bandeja para el horno. Déjala asándose durante media hora a 180º.

Cuando esté blandita tritúrala con la batidora y añade la harina y la sal, luego añade las dos claras de huevo y empieza a amasar hasta conseguir una masa con la que poder trabajar bien.

La calabaza tiene muchos nutrientes, vitamina C, betacaroteno, antioxidantes, etc. por lo que esta receta es ideal para introducir este alimento en la dieta de tu hijo/a, ¡le encantará!

 

¡A hacer rollitos!

Ahora viene la parte que más le va a gustar a tu peque, ¡la de mancharse las manos! Espolvorea en una superficie limpia un poco de harina y empezad a hacer rollitos con la masa. Puedes ayudar a tu hijo/a dándole trocitos de masa y diciéndole que haga un churrito como los que hace con la plastilina, ¡seguro que le parece súper divertido!

Cuando hayáis acabado de hacer todos los rollitos extiéndelos sobre la superficie con harina para evitar que se peguen y vete cortándolos en pequeñas porciones.

A continuación, pon agua en una olla y cuando empiece a hervir añade tus ñoquis, ¡estarán listos cuando floten!

 

La salsa carbonara

¡El acompañamiento perfecto para estos ñoquis es una deliciosa salsa carbonara! Para que te salga riquísima tendrás que pochar en una sartén con un chorro de AOVE las cebollas bien picaditas, luego añade la panceta en taquitos y cuando esté doradita vierte la nata. Deja que se cocine todo a fuego suave durante 4 minutos, añade los ñoquis y déjalo otros 4 minutos, ¡listo! ya puedes servir tu plato.

Esta receta encanta a peques y mayores, ¡la disfrutaréis seguro! Además, a tu hijo/a le encantará haberte ayudado a hacerla.

Puedes consultar en nuestro blog muchas más recetas para hacer junto a tu hijo/a, ¡juntos/as formáis el mejor equipo!